La gravedad gobierna todo lo que hacemos en la Tierra, incluida la forma en que freímos las papas. Los seres humanos han estado friendo alimentos durante siglos, y es una tarea sencilla. Sin embargo, en realidad hay más, y se trata de una ciencia compleja.
Gracias a la flotabilidad, es posible freír patatas. La flotabilidad hace que se formen burbujas en la superficie y viajen hacia arriba, lo que permite una fritura perfecta. En microgravedad , sin embargo, esta simple tarea se vuelve mucho más difícil.
Sin el tirón gravitacional, las burbujas no se elevan, impidiendo la fritura de papas crujientes. Sin embargo, se ha descubierto que es posible freír patatas en un entorno de microgravedad.
El experimento de la fritura
Los experimentos se llevaron a cabo en condiciones de ingravidez utilizando el novedoso «aparato tipo carrusel» para probar la estrategia de fritura. Los científicos llevaron a cabo dos pruebas experimentales en una instalación de vuelo parabólico de la Agencia Espacial Europea (ESA). La agencia espacial ha estado financiando investigaciones sobre los mecanismos de los métodos de cocción de frituras en microgravedad.
Se utilizó una cámara de alta velocidad y alta resolución para registrar todo el proceso de fritura, en particular la dinámica de las burbujas. Capturó varios parámetros de burbujas, incluida la tasa de crecimiento, el tamaño, la distribución y la velocidad de escape de la papa. También registró la velocidad y la dirección del movimiento de las burbujas en el aceite, así como la temperatura del aceite hirviendo.
Comprender la dinámica de las burbujas para la microgravedad es muy importante ya que «sin la flotabilidad tirando hacia arriba, las burbujas podrían adherirse a la superficie de una papa, protegiéndola con una capa de vapor que los investigadores pensaron que podría dejarla poco cocida e indeseable».
Los resultados del experimento revelaron que las burbujas de vapor se desprendieron de la superficie del aceite poco después de verter la patata en condiciones de baja gravedad, como en la Tierra.
“Además de la nutrición y la comodidad, estudiar el proceso de freír en el espacio también podría conducir a avances en varios campos, desde la ebullición tradicional hasta la producción de hidrógeno a partir de energía solar en microgravedad”, dijo John Lioumbas, quien formó parte de este estudio, en un comunicado oficial . liberar _
A continuación, los investigadores planean mejorar las capacidades del aparato. El nuevo descubrimiento de los investigadores da esperanza a los futuros exploradores, ya que no tendrán que depender únicamente de alimentos envasados o rehidratados y podrán disfrutar de esta deliciosa comida reconfortante incluso en el espacio.
Los resultados han sido publicados en la revista Food Research International .